El controvertido personaje viajó al distrito bonaerense junto a sus compañeros del Partido Conservador Popular. Además, sigue su campaña en las redes sociales: “Basta de las mismas caras, votá a la Estatua”, arengó.
Tras un fallido intento por asomar al mundo de la política en las elecciones generales del 2019, Sergio Montero, conocido popularmente como “La Estatua Viviente” del centro comercial de la ciudad de La Plata, presentó su candidatura a concejal por el Partido Conservador Popular.
Y es en ese contexto que, en los últimos días, publicó en sus redes sociales diferentes fotos donde se lo puede ver participando de un acto de campaña que se desarrolló en la localidad de Quilmes. Allí, Montero, siempre vistiendo las ropas de su singular y controvertido personaje, posó junto al resto de los candidatos de su espacio político y a un grupo de ciudadanos que participaron del acto.
“Viajando por la provincia... Apoyando a los candidatos... Hoy nos tocó Quilmes”, dice el mensaje que acompaña las imágenes, donde “La Estatua” se muestra junto a referentes del PCP, una la lista que, a nivel de diputados provinciales, postula al polémico expolicía Oscar Alvarenga, quien en 2019 ya intentó ser candidato a senador por el MODE (Movimiento de Organización Democrática) sin lograr superar la instancia de las PASO.
Al mismo tiempo, Montero compartió diferentes mensajes en sus redes sociales. Uno de ellos, es una imagen donde se lo puede ver alzando sus dedos en “V”, junto a un slogan que reza: “Basta de las mismas karas… votá a la Estatua, lista 19 PCP. El verdadero voto castigo”.
Luego, compartió otro escrito donde aclaró: “Mi face está abierto a todos los políticos, comparta o no su opinión. De eso se trata mi forma de hacer política. Respeto todas las opiniones”.
Vale recordar que Montero se hizo conocido en las calles de La Plata luego de sus expresiones políticas en plena vía pública, que le han costado, incluso, peleas con transeúntes de calle 8 o calle 12. “La Estatua” comenzó a abandonar la rigidez que supone su personaje para alzar pancartas, gritar "Macri gato" o trenzarse en discusiones con algunos vecinos y vecinas que pasaban a su lado y le respondían.