El joven estaba junto a su hermano en el local y los investigadores sospechan que fue víctima de un robo.

Un adolescente de 17 años asesinado el miércoles por la noche en el interior de la panadería en la que trabajaba en José C. Paz y el hecho conmociona a la localidad. El joven recibió cuatro puñaladas y los investigadores sostienen como principal hipótesis que fue víctima de un intento de rob.

La víctima fue identificada por los voceros como Joel Sánchez (17), y fue asaltado junto a su hermano en la panadería ubicada en el cruce de las calles Cumana y Martín Coronado, de la mencionada localidad del noroeste del conurbano.

Los pesquisas sospechan que Sánchez recibió los puntazos cuando intentó defenderse del robo, ya que según el resultado preliminar de la operación de autopsia tenía una puñalada en la zona del tórax y otras tres que le provocaron cortes en los brazos y antebrazos.

Tras herirlo, el agresor se dio rápidamente a la fuga en bicicleta, mientras que Sánchez fue trasladado por efectivos de la comisaría 3ra. de José C. Paz al Hospital Rubén Caporaletti, donde finalmente falleció.

Los voceros dijeron que en la huida al agresor se le cayeron su teléfono celular y un cuchillo tipo carnicero, que se investiga si fue empleado en el ataque, que fueron secuestrados por los pesquisas.

Los investigadores analizaban las cámaras de seguridad de la zona para dar con el sospechoso, identificado como Claudio González, quien cuenta con antecedentes penales y es conocido en el barrio.

Jésica Flores, madre de Joel, aseguró que su hijo antes de morir “le salvó la vida a otro muchacho” a quien el agresor también intentó apuñalar.

“Me llamaron los vecinos que lo habían apuñalado. El primero que llegó fue su hermano Ariel, a quien le pudo decir sus últimas palabras. Yo no sabía qué hacer de la desesperación. Me fui con él (al hospital) mientras agonizaba”, aseguró la mujer al canal Todo Noticias. “No tuvo fuerza, le vi un puñal en el corazón. En el hospital me dijeron que tuvo cuatro puñaladas”, relató.

La madre de la víctima contó que su hijo estaba cursando el 5to. año de la secundaria, que a la tarde trabajaba en la panadería junto a su hermano y que deseaba ser gendarme