Julio Rivero consideró que no hay pruebas para acusar al viudo; "La prueba me dejó solo", concluyó.
El fiscal Julio Rivero no encontró pruebas suficientes para acusar al viudo Marcelo Macarrón por el femicidio de Nora Dalmasso y el caso quedará impune. "Represento legalmente los intereses generales de la sociedad, pero eso no me autoriza a acusar por acusar. Como fiscal de cámara de esta causa, asumí un gran riesgo. Y la prueba me dejó solo", señaló el funcionario judicial.
Macarrón era el único acusado en la causa que investigaba el femicido de Dalmasso, ocurrido en noviembre de 2006 en la ciudad cordobesa de Río Cuarto. Estaba acusado por el delito de "homicidio calificado por el vínculo, por alevosía y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal".
Rivero criticó la investigación contra sus colegas, la Policía y los médicos y peritos forenses.
Asimismo, descartó que Macarrón haya pagado para ordenar el asesinato de quien fuera su esposa. "Sería un acto de irresponsable acusar a Macarrón de homicidio por promesa o pago remuneratorio", indicó.
En ese sentido, agregó: "No puedo sostener que la mató un sicario no porque no hay prueba sino porque hay prueba de que fue (sexo) consentido. El sexo consentido echa por tierra un acuerdo criminal".
Macarrón será absuelto
De acuerdo a lo establecido por la ley, a partir de la medida resuelta por el fiscal, el jurado popular no podrá pasar a deliberar para llegar a un veredicto.
Por lo tanto, al no existir una querella, y dado que el único impulsor de la acción penal -el fiscal- desistió de acusar, el tribunal técnico sólo podrá dictar un veredicto absolutorio. Así, el femicidio de Nora Dalmasso quedará impune, ya que, a más de 15 años de ocurrido, lo lleva a la prescripción de la acción penal. Es decir, si alguien confesara ser el autor material del crimen, la Justicia no podría juzgarlo.
El hecho
Nora Dalmasso fue asesinada a sus 51 años en la madrugada del 26 de noviembre de 2006 en su casona del exclusivo barrio Villa Golf de Río Cuarto, en el sur de la provincia de Córdoba. Allí residía junto al traumatólogo Macarrón, con quien tenía dos hijos, Facundo, quien por entonces estudiaba abogacía en la capital y Valentina, que para esa fecha estaba de viaje en Estados Unidos.
Las pericias determinaron que Nora murió por asfixia por estrangulamiento y su cuerpo semidesnudo quedó tendido en la cama de su hija. Por ese motivo, durante la investigación se siguieron cinco hipótesis distintas como que se trató de un crimen durante un juego sexual, un abuso sexual seguido de muerte, un femicidio y hasta asesinato por encargo.
Esta última fue con la que se quedaron los fiscales. Macarrón fue procesado en marzo de 2016 por el anterior fiscal Daniel Miralles, quien inicialmente puso en duda la coartada de que se encontraba en un torneo de golf en Punta del Este cuando ocurrió el asesinato y lo acusó de "homicidio calificado por el vínculo" solamente.
Cuando el fiscal Pizarro se hizo cargo de la causa en 2019 modificó la hipótesis y consideró que el viudo contrató un sicario para matar a su esposa mientras él estaba ausente en su viaje por Uruguay.
Hoy, con la resolución del fiscal, sin otro acusado, concluyó el juicio.