Se trata de Enrique Tkacik, por veinte años jefe comunal de Hipólito Yrigoyen. El proceso se retrasó tres semanas por problemas de salud.

El ex intendente de Hipólito Yrigoyen (Henderson), Enrique Tkacik, será sometido a juicio por el delito de negociaciones incompatibles con la función pública al detectarse que, haciendo uso de sus facultades como jefe comunal, se otorgó a sí mismo beneficios económicos, franquicias y estudios ambientales, para instalar su propia empresa de aceites esenciales en el parque industrial del distrito, a través de la firma de varios decretos y expedientes.

El juicio contra Tkacik, quien fue jefe comunal por cinco períodos, es decir veinte años, iba a empezar este martes en tribunales de Trenque Lauquen, pero fue suspendido por al menos tres semanas debido a un problema de salud que adujo en la jornada previa.

Tkacik, quien fue un dirigente cercano a Margarita Stolbizer aunque en 2015 candidato de Cambiemos, llega a juicio junto al entonces secretario General de Gobierno y Hacienda, Luis Ángel Pérez, quien acompañó con su rúbrica todos los expedientes, algo que era determinante para que cada papel tuviera validez legal.

Los casos corresponden a los años 2006 y 2007 se ventilarán en los estrados del Juzgado Correccional N° 2, a cargo del magistrado Hernán Crespo y podrían tener una pena máxima de seis años e inhabilitación perpetua para ejercer la función pública. La causa fue impulsada por varios concejales años atrás, entre los cuales se encuentra el actual intendente, Luis Ignacio Pugnaloni.

De acuerdo a la investigación, en diciembre de 2006 Tkacik en ejercicio del cargo de intendente, violando los deberes a su cargo al realizar negociaciones incompatibles con su función pública, inició gestiones ante la Dirección Provincial de Desarrollo Sustentable para conceder en su propio beneficio la categorización de Industria para radicar en el Área Industrial Planificada a su empresa denominada “Enrique Tkacik” que se dedica a la extracción de aceites esenciales, produciendo hoja deshidratada y aceite de laurel.

Siempre según la parte acusadora, en paralelo, en octubre de 2006, como un vecino particular se solicitó a sí mismo como intendente la habilitación municipal requerida para radicar su empresa en el parque industrial.

La investigación expondrá en el juicio también que luego, en febrero de 2007, en su función de jefe comunal, se concedió a sí mismo como particular, y por un plazo de 5 años, las franquicias y beneficios de la tasa municipal de habilitación de comercio e industria; de Inspección, Seguridad e Higiene; derechos de Construcción; derechos de Propaganda y Publicidad, y derechos de Oficina. Y en la misma sucesión de expedientes, en agosto de 2007, mediante un decreto, se otorgó con su firma a la empresa que está a su nombre el certificado de impacto ambiental.