El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires aseguró que el gobernador de la provincia "viene trabajando hace años por una provincia democrática y pacífica que le dijo basta a las mafias". "Todo mi apoyo", enfatizó.
Horacio Rodríguez Larreta respaldó al gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, luego de la violenta represión policial que se registró el sábado pasado en su provincia. El jefe de gobierno porteño destacó que su aliado dentro de Juntos por el Cambio "está poniendo orden y aplicando la ley".
Wado de Pedro repudió la represión en Jujuy y aseguró que Juntos por el Cambio quiere aplicar le modelo del 2001
El sábado, efectivos de Infantería de la policía jujeña reprimieron a manifestantes que cortaban el tránsito en la intersección de las rutas 9 y 52, a la altura de Purmamarca, donde también se registraron heridos con balas de goma. Hubo 21 detenidos que fueron liberados entre el domingo por la noche y esta madrugada.
"Gerardo viene trabajando hace años por una provincia democrática y pacífica que le dijo basta a las mafias. Jamás se dejó atropellar por un sistema corrupto y mafioso", sostuvo Larreta esta mañana a través de su cuenta de Twitter.
"Todo mi apoyo en este momento en donde está poniendo orden y aplicando la ley contra quienes quieren avasallarla. Las protestas violentas y atentar contra los derechos de todos los jujeños nunca será el camino para la Argentina que queremos", concluyó el precandidato presidencial del PRO.
Las personas detenidas el sábado permanecían alojadas en las unidades penales de Alto Comedero, en San Salvador de Jujuy, imputadas por el artículo 194 del Código Penal que establece la prohibición de cortes de vías de comunicación, con un máximo de tres años y un mínimo de tres meses de prisión.
Entre los liberados estaba el periodista jujeño Camilo Haro Galli; el turista de Buenos Aires Hernán Oviedo; el vocal de la comisión municipal de El Moreno Santiago Lamas; y la estudiante universitaria Carmen Benicio, residente de la comunidad de Quebraleña.
Además, producto de la brutal represión ejercida contra los manifestantes que rechazaban la reforma constitucional aprobada en la provincia, un joven de 17 años perdió un ojo debido al impacto de una bala de goma disparada por un efectivo policial.