Un grupo de siete jefes comunales busca dialogar con el presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, para hacerle saber su descontento tras las designaciones. El monopolio de las cabeceras seccionales.
Los cierres de listas dejan heridos. No es novedad. Sucede siempre. Lo complejo es satisfacer a todos. Pero, a veces, se forman grupos. Y es ahí en donde los reclamos toman forma. Un ejemplo claro se dio en la sexta sección electoral, donde siete de los ocho intendentes con los que cuenta Unión por la Patria sobre un total de 22 distritos se mostraron molestos por cómo se conformaron las nóminas de la región del sudeste bonaerense.
El problema principal se dio por la “superpoblación” de candidatos de un mismo distrito para encarar los comicios por un lugar en la Cámara alta de la Legislatura. La sexta sección elegirá este año seis senadores que buscarán representar a la región. O, al menos, esa es la intención. Resulta que los primeros tres puestos quedaron para referentes cuyo distrito base en Bahía Blanca y, como no podía pasar de otra manera, el resto de los distritos por fuera de la cabecera no quedaron conformes.
Sorprendidos por la decisión, los jefes comunales escribieron en el chat que los agrupa para ver de qué manera podían hacer oír su reclamo. Y más allá de que se hicieron algunos bosquejos para hacerle llegar al titular del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, nunca existió una carta oficial.
Así lo dejó en claro Marcelo Santillán, jefe comunal de Adolfo Gonzales Chaves en diálogo con Data Clave. “No podemos negar que nos llamó la atención, pero nunca enviamos ningún tipo de carta a Máximo. Sí nos encantaría poder reunirnos con él. Pero esa carta que circuló la puede haber hecho cualquier y poner nuestros nombres”.
En la misiva podía leerse un fuerte reclamo hacia el diputado nacional y líder de La Cámpora. “Era nuestra intención que entre los tres primeros vaya un candidato de los intendentes, que somos los que juntamos los votos y tenemos una trayectoria histórica de ganar en nuestros distritos”, decía la carta en la que aparecían las firmas de Alejandro Acerbo (Daireaux), José Ferreira (Guaminí), Ricardo Moccero (Coronel Suárez), Jorge Carreras (Tres Lomas), Marcelo Santillán (Adolfo Gonzáles Chaves), Julio Marini (Benito Juárez) y Pablo Torres (Laprida).
“Nos parece que ignorar a los intendentes habla muy mal de la política de unidad que queremos construir y para lo que nos hemos preparado durante años, queremos dejar por sentado que esto no puede suceder nunca más”, podía leerse.
Lo cierto es que la bronca existió. La selección de Marcelo Feliú, quien buscará renovar su banca a través de la representación del precandidato bahiense, Federico Susbielles; la camporista Ayelén Durán; y Santiago Mandolesi, hombre del exjefe comunal Cristian Breitenstein, no convenció a los alcaldes. Y no por algo personal, sino porque consideran que los distritos por fuera de la cabecera deberían tener alguien propio.
La explicación es simple. “A veces nos quejamos del centralismo del Conurbano. Pero en el interior también existe el centralismo de las cabeceras. El problema con esto es que muchas veces los distritos más poblados tienen un desarrollo que justamente es más similar al del Conurbano que a lo que le pasa al resto de los municipios”, sostiene Santillán.
Y agrega: “Bahía Blanca, como también pasa con Mar del Plata, se parecen poco a algunos otros distritos de la sexta, o la quinta. Algo que no pasa con Olavarría o Junín. Entonces, nos quedamos sin una voz para distritos que son chicos en población pero extensos en producción”.
En las dos últimas elecciones, la lista estuvo encabezada por dos intendentes por fuera de Bahía: Rubén “Pichi” Fisher (Laprida) y Alejandro Dichiara (Monte Hermoso). Sin embargo, en esta oportunidad hubo un cambio. Y ahora, los jefes comunales sienten que se quedaron sin la posibilidad de tener una representación fidedigna.
“Queremos tener una reunión con Máximo. Eso nos gustaría. Es la oportunidad de poder contarle cómo lo vivimos nosotros porque es un tema más profundo”, manifestó Santillán.
La sorpresa de los jefes comunales del interior se suma a otros jefes comunales como Mario Ishii, a cargo de José C. Paz, quien en las últimas horas apuntó contra Máximo y aseguró que “el Partido Justicialista de José C. Paz exige la renovación de las autoridades provinciales para marzo de 2024, ya que los mismos no están a la altura de la tarea para la cual fueron encomendados”.
La crítica del barón del Conurbano se dio porque justamente no pudo hacer entrar a ningún referente propio para ocupar un lugar en la lista rumbo a la Cámara baja de la Legislatura.