El actual intendente de la capital bonaerense anunció que se puso a disposición del representante electo, luego de la confirmación de la autoridad electoral.

Ayer, luego de idas y vueltas, la Junta Electoral de la provincia de Buenos Aires confirmó a Julio Alak, de Unión por la Patria, como el intendente electo de La Plata y desestimó el pedido de apertura de urnas que el actual mandatario de la capital, Julio Garro, había realizado.

El organismo, compuesto por Alejo Ramos Padilla, juez federal de La Plata; Sergio Torres, presidente de la Suprema Corte de Justicia bonaerense y Roberto Lemos Arias, titular de la Cámara Federal de Apelaciones.

“Hicimos reserva para ampliar el pedido de apertura de todas las urnas. De la apertura de 79 urnas surgió que el candidato de Unión por la Patria tenía registrado en actas más de 400 votos que los que se encontraron dentro”, había asegurado Garro, quien añadió: “Esto nos hace preguntarnos qué podría pasar en las 1805 urnas que representa a toda la ciudad”.

A partir del comunicado de la autoridad electoral, el actual intendente de La Plata, Julio Garro, reconoció la derrota electoral frente al candidato kirchnerista y sostuvo que garantizará “una transición ordenada”, luego de varios días de indefiniciones con respecto al resultado.

“Nunca se trató de una discusión ideológica, se trató de defender lo que cada uno de ustedes eligió”, aseguró Garro a través de su cuenta de Twitter.

“Siempre voy a defender los valores republicanos. Lo hago desde que decidí involucrarme en política, lo hice en estos 8 años como intendente y lo seguiré haciendo desde el lugar que me toque”, subrayó el intendente en salida.