El gobernador bonaerense se reunió con dirigentes gremiales para fortalecer alianzas ante las inminentes medidas de ajuste fiscal y recortes de coparticipación.
En la antesala de la asunción del presidente electo, Javier Milei, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, se embarca en la tarea de fortalecer alianzas con gremios y sindicatos con el objetivo de liderar una resistencia ante las posibles medidas de ajuste fiscal que podría implementar el nuevo gobierno.
Kicillof, que obtuvo la reelección con un amplio margen, se posiciona como uno de los líderes del peronismo con miras al futuro. Con la certeza de que su segundo mandato será con un gobierno nacional de diferente color político, el gobernador busca consolidar su figura como referente del peronismo en un período marcado por el fin de ciclo para muchos de sus líderes.
El presidente electo ha anunciado la intención de eliminar la coparticipación, generando preocupación entre los gobernadores peronistas. Kicillof, al frente de la provincia más poblada del país, tiende puentes con distintos sectores y se reúne con dirigentes gremiales para formar una resistencia ante posibles recortes de derechos laborales y medidas de ajuste.
Este viernes, en un plenario del Movimiento Mayo, Kicillof refrendó “compromiso irrenunciable” de “defender la educación pública y los derechos de los trabajadores”. Acompañado por los secretarios generales de la CTA de los Trabajadores a nivel nacional, Hugo Yasky, y provincial, Roberto Baradel; el mandatario bonaerense hizo un llamado a la unidad para enfrentar posibles avances contra los derechos laborales.
La construcción de poder de Kicillof se extiende a los intendentes, con quienes se reunió recientemente. En un encuentro con 82 jefes comunales electos de Unión por la Patria, el gobernador aseguró que peleará por los recursos que corresponden a la provincia, ante la amenaza de recortes en la coparticipación por parte del nuevo gobierno. Además, le pidió a los alcaldes que lo acompañen en esa disputa.
En este contexto, la consigna “La derecha o los derechos” resuena tanto en la retórica de Kicillof como en la de los gremios, subrayando la preocupación compartida ante las posibles políticas del gobierno entrante y la necesidad de mantenerse unidos.