Los legisladores aparecen junto a Astiz, Donda y Suárez Mason (h) Y Guglielminetti, entre otros.
La escandalosa visita de un grupo de diputados y diputadas a represores presos por delitos de lesa humanidad fue retratada en al menos una fotografía, una imagen que se conoció hoy.
En la foto se ven a Alfredo Astiz, Raúl Guglielminetti (exagente de inteligencia del Batallón 601), Carlos Guillermo Suárez Mason Jr. (ex marino responsable de delitos de lesa humanidad en la ESMA), Adolfo Donda (exoficial de la Armada y secuestrador de su sobrina, la exdiputada Victoria Donda), y Antonio Pernías, entre otros represores.
En primera fila, sonrientes, aparecen los diputados Beltrán Benedit, Lourdes Arrieta, María Fernanda Araujo, Guillermo Montenegro, y Alida Ferreyra. Hubo una sexta diputada libertaria que estuvo en Ezeiza con los represores, pero no aparece en la foto de familia que se tomaron: Rocío Bonacci.
“La actividad originalmente no era reunirse con genocidas, entonces no participe de la charla ni de nada”, dijo Bonacci a Clarín. Además, reconfirmó la veracidad de la imagen, a la que tuvo acceso este diario y que también fue difundida por el programa Argenzuela, en C5N, y el portal DataClave.
La visita a la Unidad 31 de la cárcel de Ezeiza, donde se encuentran alojados los represores, fue orgase produjo el 11 de julio pasado, dos días después del desfile militar por los festejos del 9 de Julio que encabezaron el presidente Javier Milei y su vice Victoria Villarruel, y subieron a un tanque en una postal que dio vuelta al mundo.
La reunión en el penal de los represores fue organizada por Beltrán Benedit, diputado por Entre Ríos, que minutos antes de llegar al lugar confirmó que iban a ver a represores y dio la lista completa de quiénes los iban a recibir.
Bonacci se negó a participar. Según dijo, no saludó a ningún militar condenado, ni charlo con ellos y la foto de familia que se sacaron confirma de alguna manera su declaración.
En el encuentro de diputados libertarios y represores se produjo un intercambio. El propio Guglielminetti le entregó a Benedit un borrador de proyecto para que se le otorgue a los condenados de lesa humanidad prisión domiciliaria. Es decir: una iniciativa legislativa para sacarlos de la cárcel. En la imagen que publica Clarín se puede observar el sobre papel madera en las manos del entrerriano.
La difusión de la visita, que se produjo a raíz de una publicación del sitio La Política Online, generó repudios y también un cimbronazo dentro del bloque de La Libertad Avanza. Hubo acusaciones de engaño, fuertes cruces en el grupo de chat que tienen los legisladores y hasta declaraciones insólitas como las de Arrieta, que dijo que estuvo conversando con Astiz pero no sabía quién era.