Detuvieron a dos empleados municipales con 42 tarjetas de débito con la que entregaban préstamos.
Dos empleados municipales de Corrientes fueron detenidos en un cajero automático con 42 tarjetas de débito pertenecientes a beneficiarios del plan Potenciar Trabajo. Además, la policía incautó un millón y medio de pesos en efectivo y comprobantes de transferencias por 500 mil pesos hacia sus cuentas personales. Los arrestados, un hombre de 48 años y una mujer de 45, trabajaban de manera ilegal como prestamistas, utilizando las tarjetas para cobrar las deudas de sus clientes, personas de bajos recursos.
Los empleados, identificados como C.R.M. y M.K.C., pertenecen al personal del Servicio de Atención Primaria de Salud y la delegación de Plaza Constituyente, respectivamente. Fueron sorprendidos en plena madrugada mientras extraían dinero en un cajero del Banco de Corrientes. La policía intervino tras una alerta al 911 y los trasladó a la Comisaría Séptima, donde quedaron a disposición de la Justicia.
Este modus operandi no es exclusivo de Corrientes. En Buenos Aires, un operativo reciente desarticuló una banda que realizaba préstamos usurarios y retenía tarjetas de débito para cobrar deudas. Los arrestados, entre ellos un líder conocido como “Carolo”, acumulaban tarjetas de personas que recibían planes sociales y jubilaciones. La organización llegó a tener hasta 10,000 tarjetas de débito en su poder.
El caso bonaerense también incluyó la confiscación de más de ocho millones de pesos, casi 40 mil dólares, y vehículos. La banda utilizaba estos fondos para comprar propiedades y aumentar su patrimonio, lo que llevó a la Policía Federal a realizar una serie de allanamientos en varias localidades. Las autoridades creen que algunos funcionarios gubernamentales podrían estar implicados.