Un artículo sorpresa para frenar el gasto. El desafío de cumplir con una proyección de inflación más baja que lo estimado hasta ahora: 28%. Dólar atado a la inflación y crecimiento cercano a 5%.
Javier Milei aprendió a manejar las reglas de la casta con más velocidad que lo estimado por muchos argentinos. Las negociaciones frente a frente con diputados dialoguistas que terminaron generándole un alivio cuando evitó un rechazo al veto sobre la fórmula jubilatoria maquinada por kirchneristas y algunos radicales fueron la prueba más acabada de esa nueva realidad.
Milei no avanzó solo en ese territorio, lo hizo con el consejo de Mauricio Macri y lo intensificó después con ayuda de su hermana Karina y bajo el imprevisible de la internación de Guillermo Francos. El resultado, puede afirmarse, fue un 1 a 1 con variante positiva en Diputados y saldo negativo en el Senado a pesar de las artes que desplegó Victoria Villarruel.
Esta noche, Milei lanzará otra jugada estratégica, pero de un nivel superior. El presidente organizó una cadena nacional para mostrar, tal como lo hizo en su discurso de apertura de sesiones ordinarias, sus objetivos de máxima en materia económica para el año próximo. Tendrá una presentación sui generis absoluta del proyecto de Presupuesto Nacional de Gastos y Recursos para el 2025 como nunca se vio en la historia argentina.
Milei irá personalmente a explicar la ley que, en definitiva, será el primer plan económico de su era explicitado en un texto y bajo estrictas cláusulas que garanticen el equilibrio fiscal.
Vamos entonces con algunos datos clave que contiene el proyecto que Javier Milei llevará esta noche a la Cámara de Diputados, modificando inclusive el reglamento específico para la presentación del presupuesto, votado hace décadas en el Congreso y que supone la participación del ministro de Economía de cada gobierno y la explicación del texto ante la Comisión de Presupuesto y Hacienda de Diputados. Esta vez todo cambió.
Javier Milei irá el domingo a la noche al Congreso a presentar el Presupuesto 2025
El proyecto de Presupuesto 2025 anoche estaba cerrado. Esto implica que las negociaciones habían terminado; las tensiones por los pedidos de partidas y fondos de los ministerios, provincias y organismos finalmente habían encontrado un límite.
Entre las novedades que anunciará hoy Milei se inscribe un cambio esencial. En el primer artículo del proyecto, que habitualmente está destinado a definir el nivel total del gasto presupuestario para el año, esta vez se decidió incorporar una advertencia que establece que si la recaudación no resulta la estimada en el cálculo presupuestario, el jefe de Gabinete quedará facultado para readecuar partidas y recortar gastos no prioritarios a fin de mantener el equilibrio fiscal.
En otras palabras, se confirma que el Presupuesto 2025 vendrá con un reaseguro de equilibrio fiscal para el caso en que la recaudación no cubra los gastos estimados.
En cuanto a la estimación de inflación promedio para todo el 2025, el Gobierno decidió avanzar con una proyección ambiciosa en cuanto objetivos. Así calculan una inflación promedio de 28%, casi dos puntos más abajo que la proyección inicial del cálculo presupuestario de hace dos meses, cuando se la había ubicado en un 30% que ya era considerado optimista.
El Gobierno de Javier Milei quiere dejar en claro, y así lo hará el presidente en el mensaje ante los diputados esta noche, que el combate a la inflación es el punto central dentro de la estrategia económica de La Libertad Avanza.
De hecho el objetivo tiene un contenido político indubitable: Milei sabe que el éxito de su gobierno está atado inexorablemente a la baja a la inflación y que, hasta ahora, ese fue el máximo logro que colaboró para alimentar la paciencia del público de a pie que soporta el durísimo ajuste de la economía mientras aún son pocos los sectores que muestran algún nivel de recuperación.
Por eso es que si bien la inflación promedio proyectada para el 2025 va a estar cercana a 28%, es decir punta a punta, el objetivo es que la inflación mensual final para el 2025 este por debajo de ese promedio.
En el 2025, el Gobierno va a atar la evolución del dólar a la inflación. Es decir, que la cotización oficial de billete verde va a crecer de acuerdo con la inflación programada. Eso implica que hasta diciembre regirá el crowling peg tal como lo conocemos ahora, con una devaluación de 2% mensual y luego el dólar pasaría a seguir la evolución de precios.
El cálculo presupuestario que Javier Milei explicará esta noche ante los diputados mostrará un escenario de obvio equilibrio fiscal con el sector público sin déficit. Para llegar a ese objetivo habrá déficit en la administración pública pero compensado con un fuerte superávit del sector público. El sector público es que el va a mostrar superávit. Las empresas públicas sufrirán un fuerte recorte, también los fondos fiduciarios, donde las reformas que se fueron haciendo terminaron de disolver cajas eternas que alimentaban el gasto, y de allí vendrá el equilibrio financiero.