Por primera vez, se expresaron públicamente a través de un comunicado del foro que reúne a radicales y PRO.
Los intendentes de Juntos, tanto los de PRO como los del radicalismo, salieron a pedir que el límite de las reelecciones vigente opere a partir de 2019 y no de 2015, lo que les daría a ellos –y al resto de los alcaldes, legisladores y concejales- con mandato vigente la oportunidad de aspirar a un nuevo mandato en 2023, sin importar cuándo hayan sido elegidos.
Los alcaldes fijaron una posición conjunta a través de un comunicado titulado “La re re y la desigualdad ante la ley”, que expresa las concusiones a las que llegaron en una reunión virtual que mantuvieron anoche, en un marco de tensión política luego de la irrupción de María Eugenia Vidal y un grupo de legisladores que rechazaron cualquier modificación al límite vigente, que fue sancionado en 2016, durante el mandato de la exgoberandora.
La respuesta de los intendentes adhiere a la mirada del sendor Juan Pablo Allan, quien asegura que la redacción de la ley combinada con el decreto que la reglamentó permite un subterfugio para esquivar el límite (pedir licencia antes de la mitad del segundo mandato y volver en 2023 a ser candidato) lo que genera una desigualdad entre los alcaldes que cumplen con la norma y los que vienen haciendo uso de ese recurso, la mayoría del Frente de Todos.
Por primera vez, los intendentes “blanquean” la solución que proponen. Está contenida en un párrafo del comunicado que indica que “solicitamos a los legisladores consideren simultaneamente los aspectos vinculados a la retroactividad de la ley respecto a su entrada en vigencia, toda vez que las leyes carecen de carácter retroactivo, pretendiendo limitar un mandato popular legítimamente validado por el voto de los bonaerenses”.
La clave está en la retroactividad: como la ley se sancionó en 2016 pero computó los dos períodos máximo que permite desde 2015, consideran que legisló “hacia atrás”, lo cual no está permitido. Por eso, piden que se salve es circunstancia. La idea es un nuevo artículo que reemplace en la ley vigente al que estipula el conteo, para que este comience en 2019. De ese modo, el segundo mandato de cualquiera de los cargos regulados (intendentes, legisladores provinciales y concejales) comenzaría a computarse desde 2019, lo que posibilitaría aspirar a una reelección en 2023 y tener mandato hasta 2027.
Además, los intendentes adhirieron a un proyecto presentado ayer por Allan para que los mandatos se computen desde el primer día de ejercidos, lo que imposibilitaría el subterfugio utilizado ahora en el futuro.