El dato surge de las cifras informadas por el INDEC. En diciembre había 341.473 empleados y en abril el total cayó a 322.250.
De acuerdo con las cifras oficiales, la mayoría de los empleados están en la administración pública nacional, con 215.901. A diciembre último, había 231.305, lo cual indica que el principal recorte se aplicó en esa órbita.
En empresas y sociedad del Estado, había 110.168 personas trabajando en diciembre de 2023, y a abril había disminuido a 106.349, lo cual también refleja un recorte, de casi 4.000 empleados.
Para el gobierno de Milei, la esfera pública está totalmente sobredimensionada, por lo que la política a aplicar es que el contrato que se vence, no se renueva. La administración libertaria tiene como prioridad uno el achicamiento del Estado, que experimentó un fuerte crecimiento en los últimos gobiernos kirchneristas.
También se impulsa que las provincias apliquen un recorte de empleo público, a partir de acuerdos con la Nación. El ministro de Economía, Luis Caputo, logró superávit fiscal en la primera parte del año, y el objetivo será mantenerlo cuando se complete el primer semestre.
En esta línea, el Gobierno busca sostener en el tiempo el equilibrio fiscal a costa de recortar en todos las áreas que hacen al Estado nacional. Sin escalas y con entes que aún no han sufrido recortes de personal, la motosierra de Javier Milei buscará achicar los números con tal de que las cuentas cierren, aunque esto signifique dejar un tendal de despedidos.