La reunión que Rodrigo de Loredo mantuvo con el Gobierno en la Casa Rosada cayó mal en el sector liderado por Martín Lousteau y Facundo Manes.
El bloque de la UCR en Diputados se partió tras una creciente tensión por su relación con el gobierno de Javier Milei. La ruptura se confirmó luego de que Rodrigo de Loredo, presidente del bloque radical, asistiera a una reunión con el Gobierno en Casa Rosada, lo que generó malestar en un sector liderado por Martín Lousteau y Facundo Manes. Como resultado, 12 diputados anunciaron la formación de un nuevo espacio independiente dentro del Congreso.
Uno de los factores que precipitó el quiebre fue la creciente colaboración de un grupo de radicales, apodados los “radicales peluca”, con el oficialismo. La participación de De Loredo en la reunión fue vista como una traición por parte del sector disidente. “Se confirma la ruptura porque estaban conversando y de Loredo no fue a la reunión para irse a la Rosada”, declaró un allegado a Lousteau.
Con la división, el bloque radical en Diputados se fragmentará en dos: uno liderado por Lousteau y Manes, con 12 legisladores, y otro con 21 diputados bajo la conducción de De Loredo. Fernando Carbajal, diputado del sector disidente, exigió que De Loredo renuncie a la presidencia del bloque y se una al oficialismo. “Nosotros vamos por el necesario reordenamiento del bloque”, afirmó Carbajal, sugiriendo que la separación era inevitable.
Las tensiones venían creciendo desde hacía días, con reuniones internas donde se discutieron dos posturas: la expulsión de los diputados alineados con Milei o permitirles formar su propio bloque. La propuesta de expulsión, encabezada por Manes, era minoritaria, pero reflejaba el descontento generalizado.
Por su parte, De Loredo justificó su participación en la reunión en Casa Rosada argumentando que se discutieron temas cruciales para el país, como el financiamiento de la educación y la ciencia. “Seguimos defendiendo el futuro de nuestra educación y el desarrollo científico del país”, escribió en sus redes sociales, buscando minimizar el impacto de la ruptura dentro del radicalismo.