La medida busca diferenciar los comicios locales de los nacionales, justificándose en las diferencias entre los sistemas de votación, aunque la verdadera motivación sería frenar la creciente ola de La Libertad Avanza.

La creciente influencia de La Libertad Avanza y los desafíos internos están llevando al PRO a considerar estrategias drásticas para asegurar su dominio en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).

El jefe de Gobierno, Jorge Macri, estudia la posibilidad de desdoblar y adelantar los comicios legislativos porteños, una medida que podría marcar un cambio histórico en la política de la capital.

Desde que el PRO gobierna la Ciudad, las elecciones legislativas intermedias han coincidido con las nacionales. Sin embargo, en este contexto político, el equipo de Jorge Macri evalúa desmarcarse para no compartir escenario con la figura libertaria de Manuel Adorni, candidato que lideraría la lista nacional en el distrito porteño.

Según fuentes cercanas al Ejecutivo porteño, la excusa técnica radica en la coexistencia de dos sistemas de votación: Boleta Única Electrónica (BUE) en la Ciudad y Boleta Única de Papel (BUP) en el ámbito nacional. Esta diferencia operativa, aseguran, justificaría la separación de las elecciones.

El argumento de fondo, sin embargo, es eminentemente político. En el PRO consideran que una campaña local aislada podría minimizar el impacto del ascenso libertario en el electorado porteño. “El principal adversario ya no es el peronismo ni la UCR, sino La Libertad Avanza”, admitió un dirigente cercano al jefe de Gobierno.

Jorge Macri, quien asumió la conducción de un PRO porteño fragmentado, busca consolidar su liderazgo y ganar terreno en la Legislatura. Actualmente, no cuenta con legisladores que le respondan directamente, y desdoblar los comicios sería una oportunidad para reforzar su base política.